Botonera

--------------------------------------------------------------
Mostrando entradas con la etiqueta Sagitario Films. Oro nazi para el cine español. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Sagitario Films. Oro nazi para el cine español. Mostrar todas las entradas

29.4.23

RESEÑA DE "SAGITARIO FILMS. ORO NAZI PARA EL CINE ESPAÑOL", Santiago Aguilar, Valencia: Shangrila, 2021.






Reseña de Sagitario Films. Oro nazi para el cine español,
Santiago Aguilar, en el Diario.es
Por Javier Zurro Catalá.





Leer




"SAGITARIO FILMS. ORO NAZI PARA EL CINE ESPAÑOL" (Santiago Aguilar, Shangrila, 2021) EN LA ACADEMIA DE CINE



Asier Aranzubia, Marina Díaz López, Santiago Aguilar y Felipe Cabrerizo



El pasado jueves, la Academia acogió la presentación del libro que mereció el Premio Muñoz Suay 2021: Sagitario Films. Oro nazi para el Cine Español,  a cargo de Santiago Aguilar Alvera (autor y ganador del Premio), Marina Díaz López (responsable del área de Audiovisuales del Instituto Cervantes), Asier Aranzubia (profesor de la UC3M, historiador y autor del prólogo), Felipe Cabrerizo (historiador y programador cinematográfico).

Tras la presentación tuvo lugar la proyección de El señor Esteve (Edgar Neville, 1950).



Video de la presentación



Marina Díaz López, Asier Aranzubia, Santiago Aguilar y Felipe Cabrerizo









12.1.23

LA ACADEMIA DE CINE OTORGA EL PREMIO MUÑOZ SUAY A "SAGITARIO FILMS. ORO NAZI PARA EL CINE ESPAÑOL", de Santiago Aguilar (Shangrila, 2021) COMO EL MEJOR DE LIBRO DE INVESTIGACIÓN HISTÓRICA DEL CINE ESPAÑOL PUBLICADO EN 2021






La Academia de Cine comunicó el pasado 21 de diciembre que el Premio Muñoz Suay al mejor libro de investigación histórica sobre el cine español de 2021 había sido concedido a Sagitario Films. Oro nazi para el cine español, de Santiago Aguilar (Valencia: Shangrila, 2021), "por el rigor en la investigación de una empresa y de un productor hasta ahora no suficientemente estudiado y que, en cambio, es muy significativo del contexto histórico de una época y de las relaciones entre el franquismo y la Alemania nazi”.

Nuestra enhorabuena a Santiago Aguilar que es a quién se le concede merecidamente el premio. Por la modesta parte que nos toca estamos contentos por haber publicado el libro dentro de nuestra colección dedicada al cine español, HISPANOSCOPE.






Leer




1.5.21

RESEÑAS DE "SAGITARIO FILMS. ORO NAZI PARA EL CINE ESPAÑOL", de Santiago Aguilar (Shangrila, 2021)



Reseñas de Sagitario Films. Oro nazi para el cine español, 
Santiago Aguilar (Shangrila, 2021),
en Caimán. Cuadernos de cine, por Luis E. Parés
y Dirigido, por Quim Casas




CAIMÁN. CUADERNOS DE CINE:




DIRIGIDO:






Leer







27.3.21

y XII. "SAGITARIO FILMS. ORO NAZI PARA EL CINE ESPAÑOL", Santiago Aguilar, Valencia: Shangrila 2021




Más allá de Sagitario Films


Ha desaparecido un pasajero (Alejandro Perla, 1953)



Probablemente a consecuencia de la marcha de los Bernhardt, Peláez ha diversificado aún más sus actividades. Aunque la prensa especializada no se muestra demasiado explícita, la noticia de que está empeñado en la reflotación de Roptence al trasladar a los estudios de Príncipe de Vergara parte del rodaje de La canción de la Malibrán, es objeto de toda clase de elogios:

Esto supone haber realizado no solamente un acto comercial, sino haber librado a innumerables obreros y técnicos de aquella empresa de una situación apurada, aunque provisionalmente, ya que todos disfrutan de los beneficios que reporta la presencia de la nueva entidad en los Estudios Roptence. [...] Gracias a su hábil gestión y decidida actitud en beneficio del cine español, salieron de su ostracismo para laborar en el séptimo arte de una manera eficiente y segura, que es precisamente lo que estaba haciendo falta. (284)

284. SARTO, Juan del, “Don Santiago Peláez Suárez y su labor como Consejero-Secretario de Sagitario Films, S.A.”, en RadioCinema, nº 177, mayo de 1951.

Al fin y al cabo, Roptence ha sido la sede estable de las coproducciones hispano-lusas de Ediciones Cinematográficas Faro, en un intento análogo de integración vertical al que Bernhardt ha emprendido con productora, estudios, distribuidora y sección de doblaje.

Cuando Sagitario Films abandona Cinearte, se quedan con el estudio varios profesionales ligados a la productora del centauro, como el apoderado Santiago Peláez, el director Antonio del Amo y Pedro García Leoz, el hijo del compositor recientemente fallecido. Luis Escobar –el ex-agente RIYKI– fue su consejero delegado. (285) El estudio cede su marca para acoger la producción de Fantasía andaluza (José H. Gan, 1953), cortometraje humorístico-musical de producción raquítica protagonizado por el cantante Emilio el Moro.

285. HERNÁNDEZ, Javier, “Cinearte, el superviviente”, en GARCÍA DE DUEÑAS, Jesús y GOROSTIZA, Jorge (eds.), Los estudios cinematográficos españoles. Cuadernos de la Academia, nº 10, Madrid: Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, 2001, pp.119-130.

Más ambiciosa resulta Ha desaparecido un pasajero, una producción de Cinearte promovida desde los propios estudios, en la que, una vez más, Arturo Marcos se arroga el papel de promotor y principal inversor. Lo cierto es que Santiago Peláez Suárez figura en los títulos de crédito como productor asociado junto a Arturo Marcos, en tanto que el argumento original queda acreditado a Manuel Suárez Peláez –coguionista con Santiago Peláez de El vértigo del crimen (Pascual Cervera, 1970)–, lo que, una vez más, nos induce a pensar en un proyecto endogámico. Como en este último caso, la carrera cinematográfica de Santiago Peláez en los años cincuenta y sesenta estará vinculada a Argos Films, en muchas de cuyas producciones ejercerá de director general de producción. Esta productora se pone en marcha en 1956 como plataforma para los proyectos de Antonio del Amo, con quien Peláez comparte la gerencia, en tanto que el cargo de apoderado recae de nuevo en Pedro María García Leoz. La coincidencia en puestos clave de Argos Films de antiguos empleados de Sagitario Films ha llevado a Riambau y Torreiro a establecer una suerte de filiación entre ambas. (286) El fracaso comercial de El sol sale todos los días (Antonio del Amo, 1956) empuja a Del Amo a embarcarse en la serie de películas protagonizadas por Joselito y coproducidas con Cesáreo González. Peláez es también el presidente de la primera junta de la cooperativa Copercines en 1957, en la figuran como vocales Luis Escobar y Jerónimo Mihura y en cuyo consejo de vigilancia –un órgano probablemente preceptivo en estas iniciativas cooperativistas– estaba Antonio del Amo. En 1963 Eduardo Manzanos se hace con la presidencia de la compañía y con ella se lanza a la coproducción destajista de westerns y cintas de otros filones populares en esos años. A finales de la década Peláez aparece acreditado como guionista en varios títulos. Fuera ya del mundo del cine, ejerce tareas diplomáticas en Marruecos entre 1976 y 1979. (287) [...]

286. RIAMBAU, Esteve y TORREIRO, Casimiro, Productores en el cine español: Estado, dependencias y mercado, Madrid: Cátedra / Filmoteca Española, 2008, p.844.

287. RIAMBAU, Esteve y TORREIRO, Casimiro, op.cit., p.613.




Seguir leyendo:




XI. "SAGITARIO FILMS. ORO NAZI PARA EL CINE ESPAÑOL", Santiago Aguilar, Valencia: Shangrila 2021




Académicos, bailarinas
y criminales de guerra


La canción de Malibrán (Luis Escobar, 1951)



España no ha accedido al Plan Marshall, pero se han entablado negociaciones para establecer un acuerdo comercial y militar con Estados Unidos. Arrancan en diciembre de 1950 cuando ambos países restablecen relaciones diplomáticas. El embajador estadounidense es Stanton Griffis, un alto ejecutivo de la Paramount al que Harry Truman ha encomendado la representación diplomática de su país en Egipto, Polonia y en la Argentina de Juan Domingo Perón y Evita. Desde allí viaja a España, donde desembarca en febrero de 1951. La presentación de cartas credenciales adquiere carácter de acto político de primera magnitud y así queda recogido por el noticiario No-Do. (246) En abril Griffis publica en la revista Espectáculo, órgano del Sindicato Nacional de lo mismo, un artículo en el que establece la postura oficial de la industria –y de paso el gobierno– estadounidense:

Sería mejor que las compañías cinematográficas norteamericanas pudieran tratar directamente con el gobierno español, satisfaciendo a este las cargas oportunas y suprimiendo los permisos de importación, que cotizan a precios tan elevados. (...) La embajada ha iniciado actualmente gestiones en este sentido, intentando llegar a unas posibilidades de arreglo. Pero si este no se consigue, no podrán presentarse en España las mejores y más actuales cintas americanas. (247)

246. Noticiario No-Do, edición 427-B, 12 de marzo de 1951.

247. GRIFFIS, Stanton, en Espectáculo, nº 49, abril de 1951; citado por DÍEZ PUERTAS, Emeterio, Historia social del cine en España, Madrid: Editorial Fundamentos, 2003, p.147.

De hecho Griffis dimite a final de año. En Washington han llevado la negociación el embajador José Félix de Lequerica y, sobre todo, los hermanos José Antonio y Ricardo Giménez-Arnau, muy ligados al depuesto Serrano Suñer en la primera posguerra y reciclados ambos en diplomáticos. El acuerdo cinematográfico y, sobre todo, los convenios comerciales y militares supondrán un balón de oxígeno para la maltrecha economía española hasta la puesta en marcha del Plan de Estabilización de 1959.

El restablecimiento de relaciones diplomáticas intranquiliza a los Bernhardt. En marzo, se ha casado su hija Marion con Leopoldo Dietl Pérez Roca. Actúan como testigos de la novia José Ignacio Escobar y Oskar Wilmer, concuñado de Bernhardt. (248) Para entonces, los fondos de Bernhardt han viajado de España y Suiza a Argentina. Una vez más, los informes de la CIA constatan hasta cuatro viajes de la secretaria de Bernhardt –con pasaporte español– a Suiza, Portugal y Argentina en 1947 y 1948. (249) En noviembre de 1950 Ellen Wiedenbrüg viaja de nuevo a Mendoza para asistir al sepelio de su madre, Clara von Meyren. Los vuelos transoceánicos de Ellen y Gertrud Schaefers no han sido únicamente vacacionales o por motivos familiares. Tres valiosos lienzos, regalo del estado español o acaso procedentes de algún expolio, adornaban los salones de la villa de Denia. Con el producto de la venta de dos de ellos los Bernhardt financian la compra de una finca en Tandil, equidistante de Buenos Aires, Mar del Plata y Bahía Blanca. El otro, una de las versiones de El soplón del Greco, a juzgar por todos los testimonios, les acompaña hasta allí, en concepto de seguro de jubilación. (250) En agosto de 1951 Bernhardt y su familia se despiden de sus vecinos de Denia. (251)

248. “Enlace Dietl-Bernhardt”, en ABC, 31 de marzo de 1951, p.14.

249. Central Intelligence Agency, FoIA, “Bernhardt, Johannes E. F.”, informe del 3 de octubre de 1948:

250. IRUJO, José María, “Este greco me lo regaló Franco”, en El País, 8 de septiembre de 2013:

251. WEBER, Holger, “Dénia, refugio del hombre del Fhürer en España”, en Levante, 5 de noviembre de 2006:

El despliegue organizado en octubre de 1951 para el estreno de La canción de la Malibrán parece más una cortina de humo ante la huida de Bernhardt que un evento cinematográfico. El reportaje gráfico que Primer Plano (252) dedica a la gala nos permite constatar la estructura de Sagitario y Europa Films en el momento de su ocaso. Además de Santiago Peláez, Félix Bueno de Linares y Leopoldo Dietl, aparece el director general de Propaganda Pedro Rocamora, aunque su relación con la empresa resulta ambigua a tenor del pie de foto. La empresa cuenta también como responsable de prensa con el periodista José de Juanes, crítico cinematográfico y teatral del diario Arriba y mantenedor en Radio Madrid del consultorio sentimental Hablando con la esfinge. En cuanto al núcleo duro empresarial, recuperamos el testimonio del hijo de Bueno de Linares:

Mi padre se animó, en la década de 1940, a crear una empresa cinematográfica, Sagitario Films, que alcanzó a producir media docena de películas antes de que mi padre le cogiera miedo a esa complicadísima industria y decidiera finalizar su aporte a la cinematografía. Los títulos que produjo eran de calidad todos –de acuerdo a las posibilidades técnicas del momento, obviamente– pero en detrimento de la taquilla, como siempre ocurre. (253)

252. Primer Plano, nº 574, 14 de octubre de 1951.

253. CELAYA ÁLVAREZ, Laura, Jesús García Leoz: Un legado interrumpido (1904-1953), Pamplona, Gobierno de Navarra, 2018, pp.89-90.

Completa su retrato personal el redactor de la revista RadioCinema que visita al equipo de rodaje de Alas de juventud, en cuyos créditos aparece como productor asociado:

El calor sofocante no impidió que disfrutáramos de un día grato. Bastaba para ello la charla amena de don Félix Bueno de Linares, que es una de las personas que al poco rato de tratarlas hay que pensar que es un señor que conocemos de toda la vida. (254)

254. “Un día de exteriores en Getafe: Rodando Alas de juventud”, en Radio-Cinema, nº 160, julio de 1949.

Andando los años formará parte del Consejo Superior de Cinematografía y ostentará la secretaría general de la Comisión de Cine, Radiodifusión y Televisión de la Conferencia Episcopal, cuyo principal activo son el centenar largo de emisoras radiofónicas agrupadas en la cadena Cope. (255) [...]

255. “Comisión Episcopal de Cine, Radio y Televisión”, en ABC, 3 de octubre de 1962, p.63.





Seguir leyendo:




X. "SAGITARIO FILMS. ORO NAZI PARA EL CINE ESPAÑOL", Santiago Aguilar, Valencia: Shangrila 2021




Las últimas flechas del carcaj


Cuento de hadas (Edgar Neville, 1951)



Camino de Latinoamérica o con intención de establecerse en España, muchos de los alemanes reclamados por los aliados van cruzando los Pirineos. El antiguo agente de la Gestapo Walter Eugen Mosig –cuyas actividades al frente de la red Grille con la cobertura de Sofindus relatamos en las primeras páginas– ha sido entregado a los aliados en 1946 e internando en un campo de prisioneros en Alemania del que se fuga al año siguiente. Su destino es de nuevo España, donde es contratado nada menos que por la Dirección General de Seguridad, con el paradójico cometido de localizar a los alemanes a los que hay que repatriar.

Nueva paradoja: Gottfried von Waldheim, encargado de las escuelas alemanas en España desde 1937 hasta 1945 y responsable de la Red Ogro –encargada del secuestro de compatriotas desafectos al Reich–, regresa como agregado comercial con el primer embajador que Bonn envía a Madrid para negociar con el Ministerio de Asuntos Exteriores la restitución de las propiedades alemanas a la nueva República Federal. (218) Sin embargo, este nombramiento se pospone una y otra vez debido a las reclamaciones del nuevo gobierno con respecto a la liquidación de las propiedades germanas –oficiales o aparentemente privadas– en España y la suspicacia de la cúpula franquista ante cualquier candidato a cubrir la baja. Lo malo es que los estadounidenses le están tomando la delantera a la emergente industria alemana en la modernización de España, donde actúan como interlocutores oficiosos notorios SS como Bernhardt y Otto Skorzeny, jefe de los comandos especiales alemanes durante la II Guerra Mundial y relacionado sentimentalmente con la sobrina del ministro de Economía del III Reich, Hjalmar Schacht. Con Skorzeny no había coincidido aún Bernhardt. Lo hace por mediación del periodista filonazi Víctor de la Serna en el verano de 1950. Skorzeny busca establecerse en España con el nombre supuesto de Rolf Steinbauer después de haber estado prestando sus servicios como asesor militar al gobierno peronista. Según el escritor Blanco Corredoira (219), el primer encuentro entre Bernhardt y Skorzeny habría tenido en el madrileño restaurante Horcher y durante el mismo, habrían llegado a un acuerdo para intercambiar contactos. Al parecer existe un contrato firmado por ambos por el que Steinbauer ingresa seis mil pesetas mensuales por su mediación en ciertos negocios indeterminados. A los pocos días recibe una llamada de Alemania en la que se le ofrece la representación en España de generadores de energía fotovoltaica para uso doméstico. A cambio –de nuevo según Corredoira–, Skorzeny facilita a Bernhardt los contactos necesarios para emprender una nueva vida al otro lado del Atlántico, cosa que ya hemos visto que necesita bien poco.

218. COLLADO SEIDEL, Carlos, España, refugio nazi, Madrid: Temas de Hoy, 2005, p.311.

219. CORREDOIRA, Blanco, Objetivo Skorzeny: El enigma del líder nazi que acabó sus días en España, Madrid: La Esfera de los Libros, 2017, pp.140-141.

Lo que sí parece confirmado es que tanto Skorzeny como Bernhardt trabajan en la importación de aerogeneradores Allgaier desde Alemania. También que habrían participado en la organización de un ciclo de conferencias de Hjalmar Schacht, finalmente malogrado a instancias de Asuntos Exteriores. La misma fuente asegura que Bernhardt,

que tiene intereses en la industria cinematográfica española, está negociando un contrato con una compañía alemana para la construcción de hornos y chimeneas en España. Ha llegado a un acuerdo con un abogado madrileño, [Antonio] Garrigues [y Díaz-Cañabate], y con un tal Paso [José Pazó Montes], un ejecutivo de la compañía aérea Aviación y Comercio [Aviaco], aunque la fuente no puede asegurar si ya se ha firmado o no un contrato para las patentes alemanas. (220)

220. Central Intelligence Agency, FoIA, “German Participation in Spanish Industry”, 3 de abril de 1951:

La productora continúa mientras tanto su marcha bajo la supervisión de Santiago Peláez. Administrativamente, Cuento de hadas (Edgar Neville, 1951) es la novena producción de Sagitario Films. Arranca según finaliza el rodaje de Malaire, pero un vistazo al equipo técnico de nuevo nos pone sobre aviso de que no se trata de un proyecto de la casa. José Martín al frente de la producción, partitura de José Muñoz Molleda en lugar del inamovible García Leoz, rodaje en los estudios Cea en vez de Cinearte... Y es que esta película de Neville es un proyecto propio, realizado a partir de un guion que anunciaba desde tiempo atrás como “en la línea de” La vida en un hilo, con la que comparte su universo fantástico. Apenas un mes antes de su estreno, el conde de Berlanga traspasa la titularidad de la cinta a Sagitario, que la estrenará a través de Europa Films. Christian Franco ha desmenuzado el proceso creativo que conduce de una prevista doble versión en español e inglés con un presupuesto de tres millones y medio de pesetas a una producción resuelta con cierta premura y con un coste final que rebaja dicha cantidad en un millón. (221) Según el proyecto inicial, Conchita Montes debería de haber cobrado cien mil pesetas e Ismael Merlo setenta y cinco mil como cabezas de reparto; Neville, doscientas mil por la dirección y cincuenta mil por el guion [...]

221. FRANCO, Christian, Edgar Neville, duende y misterio de un cineasta español, Santander: Shangrila Textos Aparte, 2015, pp.254-257.



Dos páginas de Sagitario Films
Capítulo "Las últimas flechas del carcaj"





Seguir leyendo:




IX. "SAGITARIO FILMS. ORO NAZI PARA EL CINE ESPAÑOL", Santiago Aguilar, Valencia: Shangrila 2021




En los platós de Cinearte


Gente sin importancia (José G. Ubieta, 1950)



A mediados de 1949 los estudios Cinearte vuelven a estar operativos después de varios años de semiabandono. El Anuario Cinematográfico Hispanoamericano 1950-51 menciona la disponibilidad de un plató de 371 metros cuadrados con cuatro columnas en el centro y una capacidad anual para albergar los rodajes de cinco largometrajes y siete cortos. (195) La realidad es que los platós nunca han funcionado a pleno rendimiento, lo que anima al grupo de Sagitario Films a invertir en su remozamiento. A pesar de que la intención inicial era que Alas de juventud se rodase íntegramente en localizaciones naturales, el consejero delegado de Cinearte, afirma que los interiores se han rodado en las nuevas instalaciones y que los exteriores de La fiesta sigue también han sido rodados con los equipos del estudio. La primera cinta cuya producción se va a llevar a cabo íntegramente allí es Volver a vivir, bajo la dirección de Mignoni. (196) Sin embargo, para cuando se publica esta noticia, el rodaje se ha trasladado a los platós de Augustus Films con el título definitivo de Noche de celos (Fernando Mignoni, 1949). (197)

195. CUEVAS, Antonio (ed.), Anuario Cinematográfico Hispanoamericano 1950-51, Madrid: Sindicato Nacional del Espectáculo, 1951.

196. “Los estudios Cine-Arte vuelven a abrir sus puertas”, en RadioCinema, nº 162-163, octubre de 1949.

197. GARCÍA, Pío, “Moviola”, en Primer Plano, nº 459, 31 de julio de 1949.

Para entonces, afloran las primeras tensiones en las empresas del grupo. Bernhardt despide a ocho empleados de Sagitario Films y Cinearte, entre ellos a los alemanes Clara Zepp y Adolph Mohr. Los despedidos reclaman ante los tribunales y la secretaria de Bernhardt, Gertrud Schaefers, media con los alemanes para que, al menos ellos, abandonen esta iniciativa. Tanto los informes de la CIA como el testimonio de Arturo Marcos parecen indicar que estas turbulencias se deben a los intentos de Santiago Peláez por hacerse con el control de Sagitario Films. Ediciones Nueva Época mantiene en este momento un perfil bastante bajo, reeditando dos veces la Introducción a la sociología de Hans Freier, cuya traducción había llegado inicialmente a las librerías en 1945, y dando un vuelco a su línea editorial en 1948 con la publicación ¿Es culpable Alemania?, de Karl Jaspers, que pone en cuestión el descargo de la sociedad alemana en el ascenso del nazismo. Salvo por alguna reedición y por la publicación de Las hadas, de María Luisa Gaffael, Bernhardt y Peláez abandonan cualquier actividad editorial en 1949. La buena marcha de la productora y el estudio requiere toda la dedicación del segundo.

Arturo Marcos era entonces un joven que buscaba el modo de meter la cabeza en el negocio del cine. Formado en el campo de la producción, no le hace ascos a cobrar un corretaje por mediar en la compraventa de negativo de estraperlo. Con el corte del suministro de película virgen desde Alemania, el boicot a España de los aliados y la política autárquica del régimen, en 1946 la producción tiene serios problemas para seguir adelante. Esta suerte de picaresca pone a Arturo Marcos en contacto “con la variopinta gente integrada entonces en la industria cinematográfica, unos profesionales y otros ocasionales. Entre estos tuve ocasión de conocer y tratar a un personaje singular”. (198) El “personaje singular” es Bernhardt, claro. Y la película que les pone en contacto Gente sin importancia (José G. de Ubieta, 1950).

198. MARCOS TEJEDOR, Arturo, Una vida dedicada al cine: Recuerdos de un productor, Salamanca: Junta de Castilla y León, 2005, p.51.

Los expedientes de rodaje y censura arrojan algo de luz sobre la gestación de una cinta que obtuvo la peor clasificación de todas las producidas por Sagitario Films y de la que Santiago Peláez pronto buscó desvincularse. El proyecto arranca en junio de 1950 con la solicitud del permiso de rodaje por parte del veterano periodista cinematográfico Joaquín Romero Marchent en nombre de Intercontinental Films - Interfilms para la película titulada entonces Natacha. Es su socio en esta productora, que se entrelaza con los destinos de Sagitario Films en las postrimerías de la década, el actor Rafael Durán. En estos momentos, los dos proyectos de la empresa son Natacha y Cielo negro (Manuel Mur Oti, 1951), que no se estrena hasta dos años más tarde. (199) La negativa de la administración a conceder el Interés Nacional a la película de Mur Oti precipita su cierre debido a las deudas que ya acumulaba la empresa. Eduardo Manzanos utilizará por vez postrera la marca para la realización de Cabaret (Eduardo Manzanos, 1952).

199. RIAMBAU, Esteve y TORREIRO, Casimiro, Productores en el cine español: Estado, dependencias y mercado, Madrid: Cátedra / Filmoteca Española, 2008, p.452.

Natacha debería de suponer el debut en la dirección de Joaquín Luis Romero Marchent, el hijo del productor, bajo la supervisión de José Luis Sáenz de Heredia. La adaptación de la novela de Feodor Dostoievski Humillados y ofendidos que le sirve de base argumental queda acreditada al guatemalteco Edmundo Nanne, introductor del beisbol en su país natal y presidente del Comité Olímpico nacional. Los protagonistas iban ser Luis Prendes, Nani Fernández, Rafael Romero Marchent y una jovencísima Amparo Soler Leal. Sus personajes componen los cuatro vértices de un desdichado enredo situado en los alrededores de San Petersburgo y con ambientación de época. Dostoievski había publicado la novela a modo de folletón periodístico en 1861 y en ella se narran los amores contrariados de Vania con Natasha, la hija del hombre que le acoge cuando queda huérfano y que administra las propiedades del príncipe Alexei Valkovski. Pero la muchacha escapa con Aliosha, el hijo del príncipe, y Vania debe hacerse cargo de Nellie, una adolescente que vive de la mendicidad. Los sucesos se acumulan en una peripecia que, desde el primer capítulo, anuncia su trágico final.

El rodaje queda autorizado conforme al guion presentado en la Dirección General de Cinematografía y Teatro el 19 de junio de 1950. El presupuesto ronda los dos millones de pesetas. Sin embargo, cinco semanas más tarde el jefe de producción de Interfilms comunica que se ha transferido el permiso a Sagitario Films. De inmediato, Santiago Peláez toma el relevo para comunicar los cambios de reparto y equipo en el proyecto, el nuevo título –Gente sin importancia– cumpliendo “las sugestiones hechas por los Departamentos Oficiales de la Cinematografía” y exponer que el libreto no ha sufrido mayor modificación “que la que concierne a determinados movimientos de cámara en el orden técnico y la diferencia de ambientes entre el ruso de 1890 y el actual de la capital de España”. (200) La apostilla parece querer minimizar lo que esconde una auténtica bomba, tanto desde el punto de vista presupuestario –que se reduce drásticamente con la ambientación coetánea– como desde el ideológico al trasladar la peripecia folletinesca original al Madrid contemporáneo [...]

200. Archivo General de la Administración, caja 36/04718.





Seguir leyendo:




26.3.21

VIII. "SAGITARIO FILMS. ORO NAZI PARA EL CINE ESPAÑOL", Santiago Aguilar, Valencia: Shangrila 2021




Nuevos horizontes


Un hombre va por el camino (Manuel Mur Oti, 1949)



Unas semanas después del estreno de Alas de juventud, Alice Wiedenbrüg, la hermana de Ellen, casada con aquel Oskar Wilmer al que conocimos como comerciante en Tetuán a principios de los treinta, expone sus esculturas en el Museo de Arte Contemporáneo de Madrid. Un busto del matador Manolete de grandes proporciones merece el elogio de José Camón Aznar (153) y Manuel Sánchez-Camargo escribe que su obra es “la buena meditación de una norma centroeuropea aplicada con una vibración latina”. (154) A buen seguro no faltaron al vernissage los Bernhardt. Incluso, es probable que el No-Do 372-A, en el que hay un reportaje en el que la artista aparece trabajando en su taller, sirviera de preámbulo a la proyección de Un hombre va por el camino, estrenada por esas mismas fechas.

153. CAMÓN AZNAR, José, “Arte y artistas: Revista de exposiciones en Madrid”, en ABC, 9 de diciembre de 1949, p.21.
154. SÁNCHEZ-CAMARGO, “Exposiciones en siete días”, en Hoja del Lunes, 12 de diciembre de 1949, p.2.

En Denia, los Bernhardt celebran cada año el aniversario del alzamiento militar con una paella para todos los empleados de la casa, invitados y vecinos. A Ellen no le duelen prendas en bailar con los subalternos, según recuerdan algunos.

Cuando el señor de la casa salía brevemente en su limosina descapotable, de la que no había otra en Dénia, no solo los niños propios, sino también los del vecindario tenían lugar. Los vecinos nunca tomaban a “Juan” Bernhardt, como le llamaban, como uno de estos distantes, rígidos diplomáticos y aristócratas, que durante los años de la Guerra Mundial entraban y salían de la casa de Bernhardt en Dénia. (155)

155. WEBER, Holger, “Dénia, refugio del hombre del Führer en España”, en Levante, 5 de noviembre de 2006: <https://www.levante-emv.com/media/documentos/2006-11-12_DOC_2006-11-05_22_42_45_endomint.pdf> [consulta: 30 de noviembre de 2019].

Sin duda, son unos excelentes anfitriones. En junio de 1950 reciben en su casa de la Colonia Metropolitana a los asistentes al II Certamen Cinematográfico Hispanoamericano; el primero ha tenido lugar dos años antes y ha servido de pistoletazo de salida a las coproducciones y a la libre circulación de profesionales entre España, México y Argentina. El principal beneficiado de esta política panhispánica es el productor vigués Cesáreo González, que celebra un banquete por todo lo alto para los participantes. Pero los vínculos de los Bernhardt con Argentina convierten su convocatoria en algo más cercano:

Hicieron los honores a los invitados los señores de Bernhardt y sus hijos, sirviéndose una cena fría después de la cual se proyectaron secuencias de las películas de dicha firma, La fiesta sigue y Un hombre va por el camino, y el famoso ballet de Las zapatillas rojas, que constituye la nota más destacada de la actualidad cinematográfica en Madrid. (156)

156. “Fiesta de Europa-Sagitario Films”, en RadioCinema, nº 169, junio de 1950.

Un año antes, Manuel Ruiz firma en nombre de la rama de distribución de Sagitario Films un acuerdo con Jaime Prades, como representante en España de Argentina Sono Films, para distribuir sus películas en América del Sur. Los primeros títulos incluidos en este acuerdo son Cuatro mujeres y La fiesta sigue. (157) Asegura Pérez Perucha que una de las prioridades de Sagitario Films era el “mercado hispanoamericano, en donde Mur Oti poseía contactos” (158) y precisamente la siguiente producción de la compañía va a servir para que este tome la alternativa como director. (159) Le acompaña en esta aventura el operador Manuel Berenguer, que hace valer sus conocimientos técnicos –ya hemos hablado de su formación alemana, así que no resulta extraña su vinculación con Sagitario Films– y solicita a la productora un tipo distinto de película para rodar los exteriores:

Había muchos exteriores de noche y para hacer la noche americana encargamos a América una emulsión de infrarrojos. Antes del rodaje tuvimos que hacer pruebas de todas clases y nos encontramos con sorpresas. Por ejemplo, las boinas nos salían blancas porque el pigmento de las boinas no era negro, sino rojizo. Pero al final la calidad de los exteriores nocturnos llamó la atención. (160)

158. PÉREZ PERUCHA, Julio, “Sagitario Films”, en BORAU, José Luis (ed.), Diccionario del cine español, Madrid: Alianza Editorial / Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, 1998, p.782.

159. MARÍAS, Miguel, Manuel Mur Oti, las raíces del drama, Lisboa: Cinemateca Portuguesa, 1992, p.225.

160. LLINÁS, Francisco, Directores de fotografía del cine español, Madrid: Filmoteca Española, 1989, pp.188-189.

Los cuatro títulos que firma durante la primera etapa productiva de Sagitario Films, la que se cierra precisamente con la salida de Mur Oti, convierten a Berenguer en el principal artífice del estilo visual de la productora.

Un hombre va por el camino supone el triunfo del paisaje sobre la dramaturgia. Los diálogos están preñados de literatura, los personajes son falsos en sus actitudes, las interpretaciones adolecen de ingenuidad en muchos momentos y el tercer acto resulta impostado. Toda la fuerza de la película reside entonces en el modo en que Mur Oti deja que el paisaje en el que se insertan los personajes sirva de motor a la historia. Monteoscuro, el terreno agreste en el que Julia (Ana Mariscal) quiere realizar el sueño de su difunto marido; las eras castellanas en las que Luis (Fernando Nogueras) decide olvidar su vagabundeo y volver junto a Julia para recoger la cosecha; el pueblo en el que las beatas enlutadas les dan de lado o el camino que Luis deberá hacer por la noche para salvar la vida de la hija de Julia (Pacita de Landa) y el que los hombres del pueblo harán para vengarse de él... [...]





Seguir leyendo: